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Este curso comienza con un vídeo dónde encontraréis una presentación general y presentación de los materiales que utilizamos en algunas danzas. Para fomentar la expresividad y la implicación de los más pequeños trabajamos con pelotas, pañuelos, cuerdas, y otras sorpresas, que hacen que el trabajo de danza sea más ameno y divertido para ellos.
El resto del curso se divide en 10 sesiones, cada una compuesta por una presentación, la clase de danza y un ejercicio de relajación que intenta regresarnos a un estado de calma y tranquilad para terminar con la sensación de estar totalmente renovados.
Idealmente el curso está pensado para que lo podáis realizar conjuntamente los adultos en compañía de vuestros/as hijos/as (o nietos, o lo que tercie…). Se trata de un curso para compartir y disfrutar juntos, lo cuál también potencia la unión. Y si bien sigue una línea para que los más pequeños encuentren su espacio en él, es un curso adaptado a cualquier edad, tanto de los adultos como de los menores. Tanto una criatura de 2-3 años como una de 12-13 años puede encontrar su espacio e interés en esta actividad. E igualmente para los adultos. Aún así, también comprobaréis que para los niños/as más mayores también puede ser una opción el realizarlo sin la compañía de los adultos si en algún momento les apetece así.
Por otro lado, invito a los adultos a dejaros llevar por vuestra esencia y poder conectar a lo largo de la actividad con vuestro niño/a interior que todavía tiene ganas de jugar y de soltar.
Veréis que el abanico de músicas es muy amplio y variado y las danzas van relacionadas con los ritmos que trabajamos con cada música.
